06 abril 2007

þö®ÇË|åîñ îÐö|


La áspera noche se colaba por la ventana del sanitario, arrebatándome el poco calor corporal que me quedaba y agudizando mi hipotermia alcohólica. Sobre mis brazos el pulcro retrete pintado con restos de comida licuada por mi estomago, alcohol y fluidos estomacales; su lisa y fría piel eran mi único cobijo en ese cuarto y mi único apoyo para por fin levantarme, no sin escupir y tambalear a medio camino. Frente a mí, el ya bien conocido fantasma: despeinado, con ojeras pronunciadas y ojos semi-desorbitados y enrojecidos, pálido y tembloroso, mirándome con aires de burla y sarcasmo. El agua escurre de mi mentón después de lavarme la boca y manos y de escupir el remanente veneno acido que quedaba en mi boca.

Dejo por fin mi templo azulejado que resguarda a mi ídolo solo para encontrarme con algo todavia más especial; imposible saber si me ve con ojos de bondad y nostalgia. O reprobatorios y furiosos, su mirada es la de una princesa de la más fina porcelana china. El viejo tocadiscos llega a la algo rayada última pista del lado A del segundo LP de Joy Division: Closer. El título de la canción lo explica todo, textual, como debe ser un titulo, sin necesidad si quiera de poner atención en la letra ni en la música: A Means to an End. Su implacable mirada paraliza mis piernas a través de mis ojos que no necesitan enfocar bien, es más, no necesitan siquiera estar abiertos, esa mirada me la sé de memoria. Mientras, yazco ahí parado y temblorino, se da la vuelta dejándome espacio para entrar a la cama, su espalda desnuda de porcelana me incita a tocarla y besarla, pero mi lucidez termina al recordar la piltrafa fantasmal que vi hace un rato; no la merezco, y no creo poder merecerla. Regreso a los temblores y los mareos mientras introduzco mi intoxicado cuerpo a la cama. I put my trust in you, in you, in you… clak! el disco termína.

Salen de su dulce boca algunas palabras al tiempo que recorro la habitación de lado a lado para cambiar la cara del disco, un poco de ruido y por fin Heart and Soul. La música suena en vano, mi entera atención (o lo que queda de ella) la tiene mi diosa de porcelana. Con amables y comprensivos susurros me dice algo por fin, después de los reproches ininteligibles para mí en este estado. Me abraza, queriendo calentar mi tembloroso ser, más por lastima que por cariño, sus muslos perfectos rozan con los míos y su apenas velludo pubis juguetea con mis caderas incitándome, excitándome, incendiándome. Toco sus bien dotados y redondos pechos, aplasto sus pezones y muerdo su cuello, el calor nos envuelve y mi hipotermia desaparece; cambio mi amarga saliva por la acida corriente que brota de su entre pierna, y la mezclo con su saliva. Clak!... termina el disco y por fin la penetro. Furioso, solo puedo ver como el fantasma le hace el amor a mi muñeca de porcelana.



Relato inspirado por Porcelain Idol escrita por Erick Ontiveros y las imagenes de mi diva. Gracias a Puyol por recordarme esto.

5 comentarios:

Wal dijo...

Porcelain idol please accept my wishes...

Evil Deshi dijo...

te ekivokaste de karrera ingeniero, deberias estar estudiando filosofia y letras n__n cuando te inspiras le das buen uso a los notepads man Saludos, sigo leyendo

Anónimo dijo...

QUE HAY, está bastante chido el texto, me latió el final; el avenger nuevo aún tardará un rato, ya sabes hay que esplotar este numerito, pero seguro habrá otro número si no ya estoy con un nuevo proyecto con el alfonso morcillo para un zine alterno, mandame ese y estaría chido otro para cualquiera de los dos fanzines.. Buneo pues estamos en contacto, salud

jb

Anónimo dijo...

sigo siendo humilde fan =D
(oye! como les fue el jueves santo¿?)

Anónimo dijo...

Mis amigas dicen ke te ekivocaste de carrera mi amor!! @_@ ke bonita la modelo jajaja :****** besosssss